De
de Paolo Coppini
De la colina miro el valle
Ya no hay un
metro de tierra verde
Sólo asfalto y cemento
Dónde yo soy dentro
Quiero huir pero no puedo
Me han puesto un reloj a la muñeca
Y controlan mis movimientos
El pensamiento
mi mente
Vivo en esta gran cárcel
¡De día trabajo,
pero! la tarde
Vuelvo a casa en mis
habitaciones
Dónde he cerrado las esperanzas
Puedo hablar y pensar
De como sería bonito
Este mundo sin leyes
Cómo cadenas te aprietan el
cuello
Aquí no hay más solución
No hay más
amor entre la gente
Sólo cuenta el dinero
Y ya no
cree más en nada
Tengo a Dios del universo
Soy yo que me he
perdido
¡Pero! No ha sido mi culpa
Si soy huido
fuera.
Mi pensamiento vuela en el cielo
Mientras mi cuerpo es prisionero
De su cuerpo, de sus ojos
Qué me cierran la mente.
Bajo abajo de la
colina
Entre el asfalto y el cemento
Dónde me parece de ahogar
Pero me tengo que acostumbrar.